LIBÉLULA
En el camino de peregrinación a Roma a través de la vía Francígena, los caminantes cruzaban Siena inspirados por la promesa del Paraíso y de la indulgencia plenaria. Iban a ver la VERÓNICA que se guarda celosamente en el Vaticano, la “verdadera imagen” de Cristo.
La ciudad de Siena invirtió en IMAGEN.
Su República es un TRIÁNGULO ARQUITECTÓNICO:
El Duomo, sede del poder religioso
El Monte dei Paschi, la banca que financia guerras y compra gobiernos.
El CAMPO, con su bello Palazzo Civico.
La IDENTIDAD CÍVICA se consigue a través de la IDENTIDAD RELIGIOSA.
Una plaza en forma de abanico, que respeta el desnivel del terreno, en comunión con la NATURALEZA, igual que los teatros griegos.
Un espacio abierto y democrático, en sentido estricto. Es la Piazza del Campo de Siena, el CAMPO.
El agua baja de las montañas y sale por los chorros de la FONTE GAIA, la fuente alegre de Jacopo della Quercia.
Los colores del travertino verde y blanco amarillento presiden el Duomo, y también la Torre del Mangia, que contra todo pronóstico se sustenta sobre adobe y exhibe su mármol en la parte más alta, para epatar al visitante.
Invadiendo el trazado urbano, ha quedado el gigantesco transepto original de la perla del Gótico toscano que aún se puede admirar como una reliquia en la plaza de la Catedral. Iba a ser el templo más grande de la Cristiandad. La peste frenó sus ambiciones. La fachada del Duomo mira al mar, no a Roma. Es una República independiente.
En el Palazzo Civico de Siena unos frescos deslumbrantes adornan las paredes de la
Sala dei Nove
LA ALEGORÍA DEL BUEN GOBIERNO DE AMBROGIO LORENZETTI
Todos sujetan una cuerda, jugando con la etimología falaz de la CON-CORDIA. También es una alegoría falaz, por tanto. Se trata de un argumento político y un programa iconográfico absolutamente propagandístico.
Entre las virtudes, la concordia, la sirena que vuela, los ciudadanos protegidos por la fe, la prudencia, la seguridad y la lbertad, está el campo mostrando los efectos del Buen Gobierno de la Ciudad y la propia urbe, donde laboriosos todos están muy ocupados, desempeñando su papel. En otro panel, los efectos del MAL GOBIERNO, todo lo que podría ser indeseable, pero que nunca sucederá.
El observador ideal sería uno de estos NUEVE ciudadanos gobernantes de la República, a quien el pintor muestra su «instantánea» en la que ha dejado un mensaje claro: tenéis que estar tranquilos, porque en esta ciudad se ha abierto un camino libre de temor. Caminad pues libres y trabajad, porque este gobierno se ocupará de castigar a los malos.
La representación de lo bueno, lo justo y lo bello es la promesa, pero también el efecto de este gobierno eficaz, la CONVIVENCIA y el PLACER DE VIVIR
Parece que fue concedida una licencia especial para bailar en las calles de la ciudad a estas muchachas del fresco de Ambrogio Lorenzetti. Forman un rondo extraño en medio de todos estos laboriosos ciudadanos, muy ocupados, cada uno en su oficio. A unos se les ha permitido también echar una partida de dados, solo un rato.
Pero ellas….ellas no paran de bailar
Necesitamos MITOS para conseguir referencias, son nuestra guía. Son los MODELOS, y también los RECUERDOS.
Las danzarinas de Lorenzetti encarnan la llamada MITOPOIESIS, o como se dice modernamente, la fiction-making.
Rodeadas por unas situaciones cotidianas y urbanas reales, ellas, en el CORAZÓN DE UNA CIUDAD BIEN GOBERNADA representan la ARMONÍA, pero están practicando un viejo lema:
UT NATURA, POESIS
Gilbert Garcin. Flash back, 2001
Sería impensable que unas mujeres vestidas de seda se pusieran a bailar como NINFAS o como SÍLFIDES griegas.
Sus vestidos de colores nos advierten que el PROCESO DEL ARTE es igual al PROCESO DE LA NATURALEZA.
Asistimos a una METAMORFOSIS NATURAL a través de los INSECTOS de su ropa.
Una ORUGA comilona, GEOMÉTRICA y esquemática pronto se convertirá en CRISÁLIDA, una larva que se traza en la seda del vestido como una CALIGRAFÍA. Su renacimiento y su transformación será en LIBÉLULA, que sigue un patrón simétrico, recreando las matemáticas de la naturaleza aderezándolas con la intervención de la mano del hombre.
Photo Martin Munkacsi “Peignoir in Soft Breeze,” 1936
Un animal que se metamorfosea, una seda incolora, una fábrica de paños, una ruta comercial, un RECORDATORIO del poder de la naturaleza encauzado sabiamente, y por fin SEDA DE COLORES.
Etro
Dicen los mitógrafos que la LIBÉLULA marca el inicio del OTOÑO, una estación de madurez, de autoafirmación, de AGUA.
Así vuelan ellas, en rápido rasante sobre los ríos. Para ser LIBÉLULA hay que ser NINFA al menos cinco años. Para llegar al equilibrio tiene que pasar un tiempo. Eso expresa el nombre romance: BALANZA
Desechamos las etimologías nórdicas referidas a dragones y serpientes, como el inglés DRAGONFLY o el alemán SCHLANGE, DRACHE. No queremos saber nada de la idea medieval que inspira temor de que la libélula es el caballo del diablo.
Preferimos el equilibrio y el SÍMBOLO DE LA FEMINIDAD más absoluta en un vestido de seda de colores de Ambrogio Lorenzetti.
Pingback: LIBÉLULA | Grand Tour | Scoop.it