UNA CHICA DE GADES
Sara Baras
Ven, Telethusa, romana de Cádiz,
ven a bailar bajo el sol marinero,
ven por la sal y las dunas calientes,
por las bodegas y verdes lagares.
Diestra en quebrar la delgada cintura,
en repicar los palillos sonoros,
diestra en volar sin dormirte en el vuelo,
en no pesar al pisar en la tierra.
Rafael Alberti (frag.)
Bailarina griega con «castañuelas» en terracota policromada, s.IV-II a. C. Antikensammlung Berlin
El gran polímata y viajero Posidonio visitó GADES para estudiar las mareas. Antes de iniciar su camino hacia la Galia para observar a los extraños celtas, descansó en su hermosa bahía.
Gracias a Estrabón sabemos de sus escritos sobre el Océano, donde contó la interesante historia del navegante Eudoxo de Cízico, que quería circunnavegar África como lo habían hecho anteriormente los fenicios, según había referido el sabio Heródoto.
El mundo de Heródoto
Este Eudoxo quería ir a la India, pero sin pasar por Egipto, para no tener que pagar los peajes que imponían los Ptolomeos.
Como era muy intrépido, consiguió llegar a Gades y en sus astilleros construyó un gran navío. Lo equipó para una gran expedición.
A bordo iban científicos, médicos, artesanos, y…un cargamento muy especial, un@s esclav@s músic@s, en género neutro, suponemos que chicas
μουσικὰ παιδισκάρια
Son las CHICAS DE CÁDIZ
PUELLAE GADITANAE
Era conocido de todos el carácter rudo y seco de los hispanos, pero los de Gades eran de otra manera.
Todas las ciudades tienen su poeta, y Gades tenía a un tal Canio Rufo, amigo del gran Marcial, hispano también y de lengua ácida, como es sabido.
Así dice el de Bilbilis que es la ciudad del sur:
LA ALEGRE GADES
Gaudent iocosae Canio suo Gades
Chirigota «Golfus de Roma» (Carnaval de Cádiz)
A las PUELLAE GADITANAE las acompaña un proxeneta muy hábil, un maestro de baile, porque el castigo de las muchachas es ser esclavas:
de Gadibus improbus magister
Antonio Gades
Hasta aquí lo que dice la Historia.
Pero la imaginación cuenta que Eudoxo traspasó los límites del mundo conocido, las Columnas de Hércules, en el mar de Gades, que pasó muy cerca de la Atlántida feliz, donde el tiempo no corría, y que al final del periplo decidió dejar a las PUELLAE GADITANAE en tierra firme, quizás harto de su energía, su alegría y su algarabía constante.
Eran tan jóvenes y tan bonitas que se pelearían por ellas en los BANQUETES de Roma. Una de ellas sobresalía muchísimo, y su nombre era una promesa de sensualidad:
TELETHUSA, la que brilla en la lejanía
Kay Francis
Cuando aparecía al final de la comida en un CONVIVIUM, las esposas comenzaban a cotillear por lo bajo, que si es prostituta, que si viene de la Subura, que esas todas tienen entre las piernas…lo que yo te diga, que ya sabemos cómo ha comprado su libertad…
A lo mejor esperas que las Gaditanas empiecen a excitarte
con su armoniosa danza y que, animadas por el aplauso, las jóvenes
bajen al suelo sus trémulas nalgas; junto al marido echado, las esposas ven un
espectáculo que cualquiera se avergonzaría de describírselo a ellas.
(Juvenal, Sat. 11, 162ss. Trad. Zoa Alonso Fernández)
)
Pero ¡atención!, ella consiguía hechizar a los invitados con sus variadas artes, e incluso, hacer perder la castidad al más pintado, a los hipólitos de la vida:
Cuando aquí Teletusa la buscona
la que mueve sus ancas, sin que túnica
ninguna se las tape-que las mueve
con más morbo que nadie y con más garbo-
se ponga a menear en tu presencia,
Príapo, sus caderas, esta tía
a tope va a ponerte, y no a ti solo,
sino incluso al hijastro aquel de Fedra.
(Corpus Priapeum 19. Trad.C.Codoñer-J.A. González)
Julio Romero de Torres, Alegrías
Sus movimientos sensuales y lascivos recordaban a aquellas bailarinas sirias llamadas AMBUBAIAE de muy mala reputación. No sin motivo Gades dicen que tuvo fundación fenicia, y a lo mejor sus antepasadas fueron prostitutas sagradas, esas devotas de Isis-Astarté.
Así lo dice el poeta:
La tabernera siria, cubierta su cabeza con el gorro frigio, ebria,
lasciva, experta en mover su axila peluda al ritmo del crótalo,
baila en la humeante taberna mientras sacude en el codo los
roncos palillos…
(Appendix Vergiliana, Copa, 1ss. Trad. Grupo Areté)
Mata-Hari
Además, a veces hace honor al bronce de Tartessos y lleva unos crótalos muy novedosos, unos címbalos tintineantes llamados CRUSMATA:
...experta en hacer gestos lascivos al son de las castañuelas béticas
y bailar con ritmos gaditanos, ésta podría empalmar
al tembloroso Pelias y excitar al marido de Hécuba junto a la pira de Héctor,
Teletusa calienta y tortura a su antiguo dueño: la vendió como esclava y ahora
la vuelve a comprar como dueña…
(Marcial, Epigr.6, 71. Trad. Zoa Alonso Fernández)
Lo cierto es que TELETHUSA ya no tendrá que aguantar más a las matronas romanas, porque hay un hombre muy rico que vive en Herculano que quiere que se incorpore a su troup de bailarinas.
Villa de los Papiros (Herculano)
Además, en esos banquetes de la Campania, los invitados no son tan puritanos. TELETHUSA podrá desplegar todos sus encantos, su arte y su increíble sex-appeal.
Le han dicho que en las horas libres podrá hacer un mini-job en algún bar de Pompeya.
TELETHUSA, que tiene un imán para las miradas de los hombres y también de las mujeres, con un cuerpo que la propia Venus envidiaría, defiende siempre que no solo se trata de ser guapa, sino que hay que tener GRACIA.
David Seymour, Venus calipigia (de bellas nalgas) en el Museo Arqueológico de Nápoles 1952
TELETHUSA no cree que Herculano vaya a ser su último destino. Le han dicho que en Sicilia hay un rico hacendado con una villa gigantesca en la que el cuerpo de baile femenino no solo se entrena en la danza, sino también en la gimnasia.
Hace tanto calor, que las niñas van en bikini:
Bikini de Emilio Pucci en Piazza Armerina (1955)
Aquellos duros antiguos
que tanto en Cádiz dieron que hablar
que se encontraba la gente
en la orillita del mar
fue la cosa más graciosa
que en mi vida he visto yo.
Allí fue medio Cádiz
con espiochas;
y la pobre mi suegra
y eso que estaba ya media chocha;
Con las uñas a algunos
vi yo escarbar,
cuatro días seguidos
sin descansar.
Estaba la playa
igual que una feria
¡válgame San Cleto!
lo que es la miseria.
Algunos pescaron
más de ochenta duros
pero más de cuatro
no vieron ni uno.
Mi suegra, como ya dije,
estuvo allí una semana
escarbando por la tarde
de noche y por la mañana;
perdió las uñas y el pelo
aunque bien poco tenía
y en vez de coger los duro
lo que cogió fue una pulmonía.
En el patio de las malvas
está escarbando desde aquel día.
(Los anticuarios 1905)
Estupendo blog compañera, gracias por la mención.
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Gracias a ti.
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Magnífico post, como siempre, informativo y muy bello. Un placer.
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Gracias. Un abrazo
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Te dejo la nota en Plinio que era un tipo muy serio y no andaba de parranda por esto te lo has olvidado, juas y rejuas
http://www.historia-del-arte-erotico.com/Plinio_el_viejo/libro4.htm#120
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Gracias.
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